miércoles, 23 de noviembre de 2011

Día 2


Al día siguiente me desperté, y pensé en ir de nuevo al instituto, quizás podría encontrar un trabajo o simplemente apuntarme a un club matinal, baje las escaleras, estaba la policía en la puerta de casa, hablando con mis padres, no sabía lo que pasaba y espere a que estos se marcharan.

Papa ¿qué pasa? ¿Por qué viene la policía a casa? –Pregunté de forma desorientada- Dicen que debemos ir con cuidado, que está habiendo una serie de extraños sucesos, la gente siente presencias dentro de sus casas como sombras moviéndose y escuchan ruidos, pero nunca termina de desaparecer nada. No le tome la mayor importancia a esto pues me parecía una mera estupidez, ¿Qué problema había si no salía nadie dañado? ¿y si no desaparecía nada?

Rumbo al instituto, me fije en una casa que destacaba, en el pueblo la mayoría de las casas eran grandes, con grandes patios y jardines, pero había una que destacaba, con unas grandes verjas metálicas, de un estilo más gótico y barroco, mucho más sobrecargada y grande que las demás y entonces fue cuando me pregunte ¿Quién vivirá hay? Seguí caminando hacia delante, hasta llegar al instituto.

Cuando entre al instituto me fije, la mayoría de la gente iba en grupos, y no podía evitar sentirme mal… echaba de menos a mis amigos, quizás jamás vuelva a verlos… quizás ellos se olviden de mí, eso era lo único que venía en mi mente. Camino al salón de actos del instituto, vi una inmensa cafetería-bar, y en este había un cartel de se busca empleado, la verdad estaba bastante interesado en pasar un tiempo haciendo algo por las mañanas y decidí hacer la entrevista ¿Por qué no?
Por lo visto nadie quería trabajar allí, y me dieron el puesto de trabajo sin ningún problema, empecé ese mismo momento, al llegar mi horario de clase salí de trabajar e iba a ir hacia mi aula cuando “ella” apareció de nuevo, la mayoría de los chicos la miraban con cara de tontos, incluso los chicos que parecían más populares del instituto, yo no me fije no estaba interesado en una chica que antes me había ignorado, demasiado borde para mí.

Al entrar a clase, me hicieron hacer una leve presentación, dije poco más que mis aficiones como escribir, leer, dibujar, poco más, no era un chico atlético o deportivo, tampoco se me daban demasiado bien los estudios no resaltaba en ningún aspecto demasiado. Aun así a nadie parecía importarle lo que decía, pero “ella” estaba allí, y me miraba fijamente, yo sentía algo extraño, ¿quizás  intentaba decirme algo con su mirada? Al terminar, busque un sitio libre en clase, pero el único libre era a su lado.

Tome asiento, y ni me gire para preguntar su nombre, no estaba ni siquiera interesado en ser su amigo. La mayoría de los chicos de la clase me miraron mal, quizás porque me había sentado con ella, no podía dudarlo era por eso, pero ¿qué les pasaba a todos los chicos con esta chica? La chica dijo, Alex compartamos libro, saque mi libro y no le dirigí la palabra, ella me miraba fijamente, como si yo tuviera algo extraño en la cara, no podía entenderlo, ¿Qué le pasaba a esta chica?

Yo me sentía incómodo perdido en clase, cuando de repente el profesor de historia dijo; bueno el chico nuevo, ¿Cuántos años duro la guerra de los 100 años? Me quede en blanco, no sabía ni de lo que me hablaba y “ella” dijo: desde 1337-1360, exactamente 23 años. Gracias señorita Claire pero la respuesta no iba con usted. Sus clases son aburridas, no suele decir nada nuevo y no me supone ningún reto responder a todas sus preguntas –Respondió la chica-
El profesor sorprendido dijo, muy bien hagámosle a la señorita Claire una serie de preguntas, si falla alguna, tiene la asignatura suspensa, el profesor se dedicó a hacerle una serie de preguntas, ella respondía a todas sin titubear, sin errores, ¿Cómo podía saber ella tanto? Respondía preguntas de cualquier tema, geografía, historia, deportes, era impresionante, era perfecta en todos los sentidos, menos en uno, ser simpática conmigo. Parecía llegar al final de su cuestionario con ella cuando el profesor preguntó: ¿Cuál fue aproximadamente el número de muertos en la primera guerra mundial?... Ella titubeo y respondió tras pensarlo un momento: 31millones aproximadamente. El profesor exclamo con una cara muy convencido se equivoca, hubo aproximadamente 20millones, Claire respondió, incorrecto 21 millones fue el número de muertos en batalla y hubo un aumento de unos 11 millones de civiles aproximadamente. El profesor con cara de asombro dijo, buscarlo en internet, y ya no le hiso ninguna pregunta más.

Gracias, ¿Claire verdad? –Pregunté- No ha sido por ti, me aburría y pensé en responder. Poco después fue el fin de clase, y ya no volví a coincidir con ella en ninguna hora más, de camino a casa, todo el mundo volvía en coche con sus amigos, era ya tarde y yo debía de volver andando así que intente ir lo más rápido posible, era ya tarde y mi padre me advirtió que fuera con mucho cuidado.

Al llegar a casa, había mucha gente allí reunida, mi padre me dijo que subiera arriba y leyera la carta que me había dejado, él no tenía ahora mismo tiempo para hablar, después hablaríamos. Subí y vi una carta y una cajita, en su interior había un anillo parecía antiguo, nada especial. En la carta ponía que era un anillo familiar muy importante, que nunca me lo quitara y que siempre lo llevara encima, este podría intentar ayudarme a escapar de cualquier problema.

Como vi que la reunión era para largo, decidí tumbarme en la cama para escribir en mi diario, y de repente vi una sombra, un reflejo fuera, en el exterior de la casa, por la ventana, me asomé pero allí no había nadie. Habrá sido una imaginación –Pensé- Y me eche a dormir, este día había sido largo, había encontrado un trabajo, había “conocido” a Claire, pero aun así, no creo que nunca pueda integrarme en ningún grupo aquí pensé, y poco después me dormi.
                                                                                                                                                               


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